EL CORTE DE JAMÓN
Uno de los momentos más especiales, la degustación de este manjar tan exquisito como es el jamón de Guijuelo.
Como todo en el jamón, es un paso importante que hay que saber ejecutar, ya que, sino se pierde mucho producto y se hace incomodo a la hora de cortar.
Para ello explicaremos unos pasos muy sencillos para que se pueda degustar de unas lonchas finas.
1º PASO
La colocación del jamón en la tabla de corte dependerá del ritmo previsto de consumo.
Para un consumo inmediato de toda pieza se colocará la pezuña hacia arriba quitándole toda la corteza, para un consumo más dilatado se colocará la pezuña hacia abajo cortando la corteza a medida que cortemos, pero siempre con el corte limpio.
2º PASO
Con el cuchillo más ancho se realiza un corte en la profundo en la caña y se retira la corteza y el tocino exterior.
A partir de aqui se cortan las lonchas finísimas manteniendo un corte lo más horizontal posible.
Cuando se deje de cortar hay que proteger el corte con tocino del mismo jamón.
3º PASO
Al llegar a la cadera se hace un corte incisivo alrededor del hueso con la punta del cuchillo.
4º PASO
Una vez pasado el hueso, se continúa con el corte obteniendo lonchas de la contramaza o culata manteniendo la línea de corte siempre recta.
5º PASO
Una vez acabada la parte de la maza se le da la vuelta al jamón y se procede a cortar la parte de atrás o mejor dicho la babilla.
Una vez acabada la babilla se procede a apurar el jamón extrayendo el jarrete que se corta en taquitos.
Con el hueso se pueden realizar cocidos excelentes.
6º PASO
Por fin llega el momento de disfrutar de un jamón ibérico bellota denominación de origen de Guijuelo.